Relación con la comunidad

Programa de minorías lingüísticas: un museo para todos

Desde el año 2006, se lleva a cabo en el Museo de Antropología de la FFyH el programa de minorías lingüísticas, destinado a la comunidad sorda de Córdoba y el país, como parte de un proyecto que busca acercar a diferentes públicos el patrimonio material y el resultado de las investigaciones científicas de la institución.

El proyecto de inclusión de las personas sordas en las actividades educativas del Museo de Antropología comenzó en el año 2006, con el objetivo de generar la accesibilidad necesaria de un nuevo público destinatario: la comunidad sorda como minoría lingüística y cultural. Esta propuesta está enmarcada en la preocupación del Museo por acercar a diferentes públicos el patrimonio material y el resultado de las investigaciones científicas.
“La accesibilidad, en principio, tiene que ver con aspectos comunicacionales, lo que implica brindar la visita completamente en lengua de señas argentina. Se asegura, de este modo, la comprensión de los contenidos por atender a la particularidad de las personas sordas, quienes desarrollan un idioma basado en la viso-gestualidad”, explican Mariela Zabala (coordinadora del Área de Educación y Difusión del Museo), Juan Druetta (sordo nativo) y Fabiola Heredia (intérprete).
Para esto, se incluyó la participación de una persona sorda como hablante nativo de lengua de señas, quién, además, realizó una preparación específica como guía del museo. “Pensar la accesibilidad de una minoría lingüística y cultural significa la adaptación de prácticas y espacios de acuerdo a la particularidad de este grupo destinatario”, dicen.

La visita
Con el asesoramiento de esta persona sorda y una intérprete de lengua de señas es que se elaboraron dos propuestas de visita en las que se contempló el contenido específico y el espacio donde se llevaría adelante la actividad, a cargo del Área de Difusión y Educación del Museo, que es la encargada de proyectar, desarrollar y evaluar las actividades educativas y culturales de todos los niveles, incluyendo proyectos específicos para escuelas y otras instituciones de la comunidad educativa.
De esta forma, se tuvieron en cuenta varios aspectos. En relación con el contenido, se pensó que la propuesta de visita incluyera la explicación de qué es un museo, ya que por la escasez de espacios culturales accesibles para la comunidad sorda, un museo no formaba parte de las posibilidades culturales más habituales. En el mismo sentido, por medio de las salas elegidas para visitar, se buscó que los visitantes comprendieran de qué se trata la antropología como disciplina.
En cuanto al espacio, se consideró la importancia de una buena iluminación para asegurar una óptima visualización del desarrollo de la visita, comprendiendo la connotación que este aspecto adquiere para la producción de un idioma visogestual. “Fue importante tener en cuenta los espacios y los modos en que los participantes de la visita se dispusieran para poder ‘ser vistos’ y permitir los ‘diálogos entre sí’, propios de las personas sordas”, indican.
Con respecto al desarrollo de la actividad, se dan los tiempos necesarios que requiere la producción de la lengua de señas, ya que en muchos casos se requieren plazos más extendidos para el desarrollo narrativo, debido al uso de la espacialidad y la corporalidad. Asimismo, es necesario apoyarse en recursos visuales y objetuales, por lo que se contempla la realización de dibujos o fichas.
Los asistentes más frecuentes son personas sordas adultas convocadas desde las asociaciones y clubes de sordos; y niños y adolescentes sordos que asisten a las escuelas de especiales de Córdoba y de otras provincias. La visita al Museo incluye el guía hablante de lengua de señas, capacitador y asesor de estrategias educativas de diferentes escuelas para sordos de nuestro país, y una intérprete de lengua de señas, quien además desarrolla una etnografía sobre los usos del cuerpo en la comunidad sorda, en el marco de la Maestría en Antropología.
“Creemos que este proyecto contribuye a pensar en la posibilidad de otros grupos humanos como partícipes de la diversidad de bienes culturales que se desarrollan tanto para las personas destinatarias del proyecto, como para los gestores y los demás participantes de las visitas, conocer sus potencialidades y traducirlas en estrategias de accesibilidad que beneficien a todos, no solamente a los destinatarios específicos”, señalan los encargados de la actividad. “Además se pueden llevar a la práctica los valores asociados a la comprensión del ‘otro’ que se propone desde la antropología como disciplina”, agregan.

Una misión del Museo
Es importante destacar, además, que esta iniciativa se encuentra en el marco de un proyecto más amplio del Museo de Antropología, que busca llegar a nuevos públicos en el cumplimiento de su misión institucional.
Hasta este momento, se desarrollaron cursos intensivos de lengua de señas y visitas guiadas para grupos escolares y grupos de la asociación de sordos. También se realizaron visitas especiales para el Día Internacional de los Museos y el Día de la Lengua de señas.
Entre las instituciones de Córdoba que ya visitaron el Museo y realizaron las actividades propuestas en el programa, se encuentran el Instituto Bilingüe para Sordos (IBiS), el Instituto del Lenguaje y la Audición Córdoba (ILAC) y la Organización Cordobesa de Sordos. Por otro lado, contó con la visita de la Escuela Nº 7 “Edith Fitzgerald”, de la ciudad de Paraná (Entre Ríos),
“Como proyección, tenemos varios objetivos: queremos llegar a un mayor número de visitantes; diversificar las temáticas de las visitas; formar nuevos guías sordos; elaborar videos para las visitas y acompañar la incorporación de guías sordos en otros museos universitarios”, detallan Zabala, Druetta y Heredia.
Por último aclaran: “Cualquier iniciativa que busque ampliar los diferentes públicos a los que se pretende acercar la propuesta educativa y cultural del museo, no tiene pretensiones de ‘exotización’ de grupos humanos, sino que aspira a la atención de las especificidades y la disposición de medios que aseguren el desarrollo de la misión institucional, poniendo los resultados científicos al alcance de la comunidad”.
“En relación con este proyecto, significa la ampliación del horizonte de posibilidades asociadas al conocimiento y al disfrute para las personas sordas y las desmitificación de que estos espacios son ‘cosa de oyentes’”, concluyen.

A dónde dirigirse
Si bien los organizadores ya dan a conocer este servicio a las escuelas de sordos a través de invitaciones y en eventos especiales de la comunidad sorda, como en el mes de septiembre el Día Nacional del Sordo o el Día Mundial de la Lengua de Señas, todas las instituciones educativas o comunidades de sordos interesadas en el proyecto pueden dirigirse a la sede del Museo de Antropología, Av. Hipólito Irigoyen 174, Nueva Córdoba. Teléfono 0351-4331058 int. 301. O al e-mail: museo@ffyh.unc.edu.ar

> volver