Agosto - Septiembre 2007 | Año 3. Nº 19
UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA, Argentina
 


Relación con la comunidad

Crearán un banco de imágenes de las víctimas de la dictadura

“Patrimonio documental, derechos humanos y acceso a la información” es el título de la propuesta del Centro de Documentación Audiovisual (CDA) que obtuvo la suma de 20 mil pesos en una convocatoria del Ministerio de Educación de la Nación. El proyecto, que se extenderá hasta julio de 2008, consiste en la realización de un banco de imágenes digitalizadas de personas detenidas desaparecidas o asesinadas durante las décadas del 70 y el 80, que aparecen en los registros fílmicos de canal 10.  Este archivo quedará en manos de los organismos de derechos humanos que participan en la experiencia.

En el mes de junio, el Programa de Promoción de la Universidad Argentina, llevado adelante por la  Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología, lanzó la convocatoria “Un puente entre la universidad y la sociedad” y desde el CDA, se presentó el proyecto "Patrimonio documental, Derechos Humanos y acceso a la información. Una propuesta del Centro de Conservación y  Documentación Audiovisual - Archivo Fílmico, de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC", que fue aprobado y será financiado hasta julio de 2008 con una suma total de 20 mil pesos.
Una de las características principales de este proyecto es que el Centro de Documentación Audiovisual trabajará juntamente con organismos asociados, como el Archivo Provincial de la Memoria, Hijos, Abuelas de Plaza de Mayo y el Centro Tiempo Latinoamericano, entre otros.
Por este motivo, Silvia Romano, directora del CDA, señala que esta idea “fue la posibilidad para articular una serie de acciones” que ya se desarrollaban en relación con la problemática de los derechos humanos, como “facilitar y contribuir a rescatar imágenes y localizar personas detenidas desaparecidas o asesinadas”.
“A través de este proyecto, se puede llevar adelante algo que habíamos iniciado a fines del 2006 con el Archivo Provincial de la Memoria, que era realizar un relevamiento de fondos documentales y colecciones en distintos soportes, que estuvieran relacionadas con la violación y defensa de los derechos humanos durante la década del 70 y 80, para conformar una red de archivos, permitir su acceso para la investigación y preservar esos documentos”, explica Romano.

Para restituir humanidad
El trabajo de investigación tiene varias etapas, que se ejecutarán simultáneamente a lo largo del año. Por un lado, se reunirán en una guía los nombres de las personas y fondos documentales con los que cuenta cada organismo, gremios o facultades, además del material incorporado en el poder judicial. Esto, que implica un arduo trabajo porque se debe elaborar a través de numerosas entrevistas y encuestas a familiares, amigos, conocidos e instituciones, se hará junto al Archivo Provincial de la Memoria.
Al mismo tiempo, se realizará un banco de imágenes digitalizadas de los videos donde se hallen las personas, mediante la captura de un fotograma. La búsqueda será en el archivo de canal 10 (circunstancialmente en el de canal 12), y está focalizada en las víctimas del terrorismo de Estado, desde fines de los 60 y principios de los 70 hasta la década del 80 que, por su actividad pública, puedan aparecer en los registros. Luego, estas imágenes serán entregadas a los organismos de derechos humanos involucrados en el proyecto.
“Hay mucho material que puede servir para restituir, de alguna manera, humanidad a las listas de nombres que conocemos. Es devolver imágenes y fisonomía a las víctimas del terrorismo de Estado”, dice Romano.
También se formará un corpus documental con todos los registros que hay en la base de datos del CDA, relacionados la violación de los derechos humanos, las víctimas y los lugares de represión. A esto, se sumarán algunos aspectos de la resistencia, como por ejemplo las demandas por la libertad de los presos políticos.
Finalmente, el último aporte del CDA es la realización de un documental, a partir de la selección de registros. “La idea es rescatar a los individuos en los lugares y en las actividades en donde actuaban, lo que permite situarlos en la época y en sus trabajos o profesiones”, indica la directora del CDA.
Además de encontrar estas imágenes y realizar completamente el proyecto, el objetivo es generar dentro del Centro un espacio de consulta especializado en derechos humanos.
Cabe destacar que el equipo de investigación y trabajo está conformado por profesionales que vienen de distintas áreas de las ciencias sociales, entre los que se encuentran: Silvia Romano (historiadora y directora del proyecto); Marta Olga Palacios (fotógrafa e historiadora); Malvina González (comunicadora social); Graciela Tedesco (comunicadora social y magíster en Antropología); María Virginia Ramos (historiadora); Norma San Nicolás (archivera); Natalia Bermúdez (comunicadora social y magíster en Antropología); María Teresa Sánchez (abogada y representante legal de Abuelas de Plaza de Mayo) y Mónica Álvarez (licenciada en Cine y TV). A este grupo interdisciplinario, se sumarán dos pasantes para colaborar con la tarea.

La identificación
“Tenemos un listado amplio y vamos a rastrear a esas personas en toda la documentación de los 60 y los 70 que tenemos de canal 10. Por un lado, buscamos la trayectoria de cada uno para poder localizarlos en alguna de las imágenes y, de ahí, digitalizarla”, explica Romano acerca de cómo se va a hacer el trabajo y continúa: “Hay muchos que eran militantes pero no tenían una exposición pública. Nosotros indagamos aquellas personas que pudieron haber tenido una actividad de dirigencia estudiantil, gremial, social, política, profesional, de defensa de derechos humanos o funcionarios del gobierno y vamos a reconstruir su historia y su trayectoria”.
Algunos ejemplos para destacar, de imágenes que ya fueron encontradas, son los del abogado de presos políticos Alfredo Curuchet, el ex gobernador Atilio López y el cronista de canal 10, Luís Mónaco. También hay casos fortuitos como el de una de las integrantes del equipo, que reconoció a una persona, desaparecida, que se veía en las imágenes del entierro de Alfredo Curuchet.  “Es un gran trabajo de investigación porque, por más que tengamos una serie de personas identificadas, hay otras para las que hay que hacer entrevistas a los familiares o amigos para definir si es la que buscamos o no”, indica Romano.
Aunque la directora señala que algunas integrantes puedan reconocer a simple vista a las personas en las cintas, también manifiesta que este es un “trabajo cooperativo” en el que los organismos y familiares ayudan al equipo para la identificación.
Por último, Romano explica que en el proyecto no se van a utilizar imágenes ya publicadas o que pertenezcan a los familiares, aunque éstas pueden servir para buscar a las personas en el archivo de canal 10.