Silvana Yomaha es docente de la Escuela de Historia y durante los meses de enero y febrero de 2020 participará en Egipto del Proyecto Amenmose, que se propone la conservación y estudio de una tumba ubicada en Luxor. “Es muy importante para mí, porque es la concreción de un anhelo de mucho tiempo y habilita la formación de quienes se interesan por la Egiptología en la Argentina”, afirma.
“Me inscribí para el Profesorado y la Licenciatura en Historia de la Escuela de Historia de la Facultad de Filosofía y Humanidades en 1994, sabiendo que quería ser egiptóloga. Mi recorrido académico fue de búsqueda permanente para formarme como tal, ya que en Córdoba no había nadie que tuviera esa especialidad”, cuenta a Alfilo Silvana Yomaha desde San Rafael, Mendoza, donde vive actualmente. Ella viaja hasta Córdoba, su lugar de origen, para dar clases en la cátedra de Historia Antigua General de la Escuela de Historia, donde ejerce como Profesora Asistente, luego de haber terminado la Licenciatura y el Doctorado en Historia en la FFyH.
“Las profesoras Ana María Sayago (JTP de Historia Antigua en ese momento), Norma Galván y Ana Inés Punta cuando eran respectivamente directoras de la Escuela, me ayudaron en ese camino y principalmente la Dra. Cecilia Ames, cuando recién llegada de desarrollar su doctorado en Tübingen y se hizo cargo de la cátedra de Historia Antigua General, me contactó con una reconocida egiptóloga alemana (Ingrid Gamer Wallert) que, al ser invitada a dar una serie de conferencias, me dio la clave: los nombres de Perla Fuscaldo y María Violeta Pereyra, egiptólogas que en aquel momento (1995-1996) tenían proyectos de trabajo de campo en Sinaí, Egipto. Me contacté con ellas y la Dra. María Violeta Pereyra fue mi formadora, mi directora de tesis de licenciatura y doctorado y con quien trabajé por primera vez en Egipto, en la tumba tebana de Neferhotep, proyecto que hasta el día de hoy se encuentra bajo su dirección”, relata Yomaha sobre su recorrido académico.
En 2020, la docente de la FFyH participará en el “Proyecto Amenmose», que se propone la conservación y estudio de la tumba ubicada en Sheikh Abd el-Qurna, Luxor (Egipto). Amenmose, uno de los encargados de organizar la construcción de los monumentos de la época, fue enterrado en la necrópolis de Amón y vivió durante los reinados de Hathsepsut y Tutmosis III, entre 1479-1458 a.C. Su tumba es de 40 metros cúbicos y tiene 1,65 metros de alto y nunca fue investigada.
Este proyecto está radicado en el Instituto de Investigaciones en Humanidades y Ciencias Sociales (Universidad Nacional de La Plata- CONICET) y el equipo está compuesto por investigadores, estudiantes y graduadxs de la UNLP, la Universidad de Buenos Aires (UBA), la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y de la Universidade Federal do Triângulo Mineiro (UFTM).
“El proyecto Amenmose fue mentado hace muchos años con mi compañera, formadora y amiga, la Dra. Andrea Zingarelli, de la Universidad Nacional de La Plata, ya que entendemos que el trabajo de campo como escuela permite la formación de los recursos humanos interesados en la egiptología, en nuestro país”, continúa Yomaha, quien participó entre enero y febrero de 2019 de un viaje junto a un grupo de egiptólogas y arqueólogas de las universidades de Buenos Aires, Quilmes y La Plata a realizar un relevamiento, estudio y solicitud ante el Servicio de Antigüedades de la República Árabe de Egipto, con el objetivo de presentar ante el Comité una solicitud para el estudio y conservación de un monumento funerario.
“Luego de numerosísimos recorridos por la necrópolis de los nobles de Tebas, la actual ciudad de Luxor, y el asesoramiento y compañía de funcionarios, vecinos, inspectores y habitantes de la ciudad, y el rastreo bibliográfico de referencia, principalmente en la Biblioteca de la Universidad de Chicago, en Luxor (también hicimos compulsa bibliográfica y búsqueda de información en el Museo de El Cairo, en el Instituto Francés de Arqueología Oriental –IFAO- y en el American Research Center), estuvimos en condiciones de elaborar el Proyecto de investigación y presentar los formularios requeridos por el Servicio de Antigüedades en el área que atiende a las misiones extranjeras”, señala Silvana, que participará como codirectora de la misión que dirige Zingarelli, profesora titular de Historia General I Cercano Oriente Antiguo en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, y que participa desde la década del 90 de excavaciones en Egipto.
“Todxs somos miembros de universidades públicas, entendemos que la educación pública abre puertas al mundo y hace posible que exista igualdad de oportunidades para quienes quieran formarse en la ciencia y, a partir de allí transitar caminos colectivos. Hemos sostenido trabajos en redes desde nuestras posibilidades, compartiendo bibliografía, traducciones de textos, fotografías, catálogos de objetos, etc. para hacer posible y sostener la formación en Egiptología en Argentina desde que Abraham Rosenvasser inició este camino”, dice sobre una de las principales características del proyecto, ya que lxs participantes son egresadxs de la educación pública universitaria argentina.
Para Yomaha, este proyecto es muy importante porque “es la concreción de un anhelo de mucho tiempo”. “Entiendo que contar con un Proyecto propio asentado en Luxor habilita la formación de quienes se interesan por la egiptología en la Argentina, en particular mis ayudantes de la cátedra de Historia Antigua General, que hace muchos años se están formando para trabajar con ese objetivo en el campo”, pero también hay algunas cuestiones personales: “Egipto me significa muchas cosas, desde lo personal se vincula con la consecución de los objetivos, el bienestar, la comunidad egipcia, en Luxor sobre todo, es sumamente afectuosa. Trabajar allí, si bien presenta sus dificultades, es sumamente gratificante. Gracias al acompañamiento de mi familia, porque mis viejos me bancan con este delirio desde muy chiquita, en enero de 2018 logré viajar allí con mis dos hijos, Dante y Ciro. Creo que ese viaje terminó de hacer posible la concreción de este sueño. Pero lo más importante es que no es un anhelo individual sino un sueño y un gran desafío colectivo!!!”.
Proyecto Amenmose
El equipo dirigido por Zingarelli y Yomaha, compuesto por 13 egiptólogxs argentinxs y un brasilero -de lxs cuales 12 son mujeres- presentó un proyecto para el estudio y la conservación de la tumba tebana número 318 (número de catalogación asignado en la necrópolis) del funcionario Amenmose, un cantero de la necrópolis, cuya datación se encuentra en el período de reinados de Tuthmosis III y Hatshepsut.
Actualmente, el Servicio de Antigüedades egipcio no otorga permisos para realizar excavaciones por lo que solicitaron la apertura del monumento, la posibilidad de estudiar el estado real y actual del monumento (se trata de una tumba rupestre, excavada en el macizo rocoso tebano), fotografiar las pinturas murales y bajorrelieves que se sabe que existen a partir de las publicaciones que dan cuenta desde época de Champollion (fines del siglo XVIII) y hasta el siglo XX y , a partir de allí, priorizar la limpieza del acceso (la entrada original de esta tumba no se encuentra despejada ni accesible y hay que ingresar a ella a través de otra tumba), la conservación de los muros y de la tumba en sí misma.
“Nuestra propuesta de preservación de la tumba tebana de Amenmose resulta importante para el gobierno egipcio ya que es de su interés no sólo la conservación y apertura a futuro de los sitios para el desarrollo del turismo y la investigación, sino porque además contribuye a los saberes que se construyen en el mundo acerca de su patrimonio tan vasto y rico”, afirma Yomaha. “Las expectativas tienen que ver con la preservación del monumento, la posibilidad de dar a conocer su entrada original y principalmente conservar las pinturas y bajorrelieves que decoran las paredes del sepulcro. A partir de un primer relevamiento del estado actual de la tumba podremos definir las líneas de abordaje y análisis epigráfico, documentar textos e imágenes, arqueológicas y proyectar la reconstrucción virtual del monumento en su estado original”.
El financiamiento de este proyecto es auto gestionado –aunque lxs investigadores enviaron solicitudes a fundaciones que sostienen el desarrollo de la ciencia en distintos países- “ya que el actual gobierno ha desfinanciado la ciencia en nuestro país”, dice. “Por lo tanto, todos los proyectos que tenemos aprobados y con financiamiento no han sido acreditados hasta el momento. Hemos armado una Asociación Civil Misión Argentina Amenmose en Tebas, con el fin de solicitar donaciones y canalizar los aportes y contribuciones de quienes quieran colaborar con el Proyecto”.
Un primer grupo viajará el 12 de enero (entre quienes se encuentra Silvana) para iniciar las gestiones y presentar la documentación con la cual se emiten los permisos de trabajo. El resto se irá incorporando en la segunda quincena de enero y esta primera campaña está prevista hasta el 27 de febrero.
Por Pablo Giordana
Fotos: gentileza Silvana Yomaha