Del 26 al 28 de junio se realizaron las II Jornadas de Jóvenes Investigadorxs, organizadas por las Facultades de Filosofía y Humanidades y Artes de la UNC. En esta oportunidad, se puso el acento en la comunicación como un eje central a la hora de pensar la producción académica y artística, con la idea de que es un diálogo de saberes entre los actores universitarios y los sujetos y organizaciones que son objeto de investigación.
Durante tres días, en las II Jornadas de Jóvenes Investigadorxs que organizaron las facultades de Filosofía y Humanidades y Artes de la UNC, se presentaron 180 trabajos en diferentes formatos en 41 mesas, hubo talleres y tres paneles con especialistas en comunicación artística y científica.
Además de la realización conjunta entre dos instituciones que comparten docentes, equipos de investigación, y una historia en común, este año las jornadas pusieron el acento en la comunicación de lo que se produce. No sólo para tensionar el concepto clásico de divulgación científica desde la mirada de “diálogo de saberes” entre los actores universitarios y los sujetos y organizaciones que forman parte del proceso investigativo, sino también para que la sociedad que sostiene y financia la universidad pública conozca y se apropie lo que se produce en cantidad y calidad, en un contexto actual de recortes presupuestarios, ajustes al sistema científico y tecnológico y demonización de todo lo que se hace desde las Humanidades y las Artes.
Para abordar estos ejes, entrevistamos a Jacqueline Vasallo, secretaria de Investigación, Ciencia y Técnica de la FFyH, Marina Tomasini, secretaria de Investigación y Producción de la Facultad de Artes y Darío Sandrone, Doctor en Filosofía, autor del libro “Selva Artificial” (editado por la UNC) y habitual columnista de los diarios Hoy Día Córdoba y La Voz del Interior.