A través de la Resolución Rectoral 2020-387, las autoridades de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) decidieron posponer el inicio de clases, que comenzarán el 1 de abril. En este lapso, las Facultades podrán preparar los sistemas y coordinar con docentes y estudiantes la migración de las actividades áulicas al ámbito virtual, mientras dure la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus (Covid-19).
La decisión está en línea con la del Gobierno nacional de suspender las clases para los niveles inicial, primario y secundario hasta el 31 de marzo.
Además, se dispuso suspender todo tipo de funcionamiento de extensión universitaria, incluyendo las deportivas.
En otro artículo de la resolución se señala que “las demás actividades de la Universidad Nacional de Córdoba se desarrollarán con normalidad, siempre y cuando no medien recomendaciones sanitarias que impidan dicha normalidad, y no afectará la asistencia del personal docente y no docente».
También se faculta a las autoridades del Área Central de la UNC, de las distintas Unidades Académicas y Colegios Preuniversitarios a «fijar las modalidades específicas para dar cumplimiento» a la Resolución, debiendo en todos los casos «asegurar la continuidad de las tareas habituales conforme a las necesidades y particularidades de funcionamiento de cada una de ellas”.