El miércoles 15 de noviembre se realizó la segunda colación de Posgrado, Grado y Pregrado de 2023. En la Sala de las Américas del Pabellón Argentina se entregaron 168 diplomas a egresadxs que destacaron la importancia de la educación pública en nuestro país. “La gratuidad tiene una potencia inmensa”, sostuvo la Decana de la FFyH, Flavia Dezzutto.
En un contexto electoral decisivo para el presente y futuro de las universidades públicas y nacionales, la segunda colación de Posgrado, Grado y Pregrado de la FFyH de 2023 estuvo atravesada por esos desafíos y debates en torno a la educación en general y universitaria en particular. Así lo hizo saber Silvia Lonatti, maestra de ceremonias, que en su primera intervención arrancó un emocionado aplauso cuando le habló a quienes esperaban ansiosxs sus diplomas, y a los afectos que lxs acompañaban en una Sala de las Américas colmada: “Hoy en esta Universidad Nacional de Córdoba, pública, laica, gratuita, democrática, inclusiva, jurarán y se comprometerán a trabajar para que el conocimiento aprehendido sea empleado en la construcción de una sociedad cada vez más justa y en una ciudadanía crítica, para que sus prácticas profesionales y académicas estén al servicio de la justicia, la igualdad social y los valores democráticos”.
Situadas en un clima político e histórico, Lonatti enmarcó la ceremonia en una fecha especial: “Juran no en cualquier año, cumplimos 40 años ininterrumpidos de democracia, luego de la genocida dictadura cívico militar que se instauró en nuestro país en 1976. La mayoría de ustedes son muy jóvenes, han nacido y crecido en nuestro país en democracia, con las tensiones propias de las sociedades democráticas, con las insatisfacciones que nos genera la pobreza y las brechas de desigualdad cada vez mayores pero con el ejercicio ciudadano en libertad a través del voto y la participación y no a punta de fusiles”.
Pilares fundamentales de esa recuperación democrática en 1983, y después del ingreso de lxs 168 egresadxs de las carreras de Posgrado, Grado y Pregrado a un pabellón colmado y entusiasta, la conductora del acto resaltó que “la memoria de los pueblos no puede tener olvido, debe estar más viva que nunca para avanzar al porvenir, defender y ampliar los valores democráticos con ampliación de derechos y justicia social para revertir esas injusticias y desigualdades que persisten y se amplían, es tarea de toda/os los ciudadanas/os. Tenemos un compromiso insoslayable para que el NUNCA MÁS, que algunos quieren negar, se constituya en precepto constitucional para nosotras/os para nuestras/os hija/os y todes quienes quieran habitar el suelo argentino”.
Cantado el himno y presentados los flamantes abanderados de la Facultad, fue el turno de la Decana, Flavia Dezzutto, quien advirtió el transitar de “un tiempo complejo, desafiante, incierto, muchas veces desconcertante. En esta segunda colación de 2023, nuevamente un nutrido grupo de egresados y egresadas dan testimonio de la fecundidad de la universidad pública argentina. Una universidad que lleva inscriptas todas las marcas de la historia. Nuestra universidad, la UNC, con cuatro siglos y algo más de existencia, nos muestra esas marcas, en las que puede percibirse la trama de opresiones y liberaciones, de conservadurismo y ciencia libre, de vidas comprometidas con la revolución y de terrorismo de estado y de democracia recobrada, dura y felizmente recobrada”.
Luego de agradecer a egresadxs, familiares, equipo de gestión, directorxs de escuelas y departamentos y a todxs lxs trabajadores de la FFyH y del Pabellón Argentina que habían hecho posible el acto de colación, compartió un discurso (que se puede leer completo en https://ffyh.unc.edu.ar/alfilo/nunca-esclavos/), en el que puso en valor lo que hoy está en juego –y en riesgo- a partir de proyectos privatizadores, autoritarios y exclusivamente mercantiles de la vida: “La gratuidad tiene una potencia inmensa, excava en los tesoros de la solidaridad, del reconocimiento de que cualquier ser humano vale, de que lo que podemos construir en comunidad se derrama en el dinamismo de lo incalculable, de lo que no podemos reducir a su valor de intercambio porque no lo tiene, pues obtiene su valía de otras fuentes, las que nos confirman en una humanidad compartida”.
En otro fragmento muy aplaudido por el público, la Decana recordó que “nuestra universidad es hija de la lucha de los pueblos, incluso del largo caminar de quienes nunca han atravesado sus puertas. Somos hijos e hijas de un gran gesto de generosidad, de un enorme y apretado abrazo de igualdad. En este instante decisivo para nuestra vida colectiva nuestra difícil democracia cumple 40 años, esta democracia que ha surgido, en lo que tiene de mejor y más digno, de un caminar firme, veraz, claro. Hablamos del caminar de nuestras Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, que nos han enseñado una paciencia combativa y amorosa, la paciencia de cada paso, la que discierne lo invisible, la que comprende los signos de la vida en barbecho, la que enciende nuestra esperanza en medio de la más apretada noche. Recordamos hoy y aquí a Sonia Torres, abuela de Plaza de Mayo, que siempre caminará con nosotros, y nos seguirá desafiando a construir en medio de las ruinas y a celebrar el florecer de todos los desiertos”.
Gracias universidad pública
La posta de las palabras la tomaron dos egresadas. La primera, Liliana Inés Gazzulla, quien poco después recibiría su diploma de Especialista en la Enseñanza de la Lengua y la Literatura: “Para todos y todas quienes estamos ahora acá, hoy es un día especial. También lo es para mí. Desde que comencé la carrera de Letras Modernas, allá por el 2001, hasta hoy, la Facultad de Filosofía y Humanidades representa para mí aquel hermoso espacio. No me resulta sencillo ocupar este lugar y tomar la palabra en nombre de los y las egresados y egresadas de Posgrado, porque cada quien ha llegado a este lugar por un camino propio, lleno de particularidades y porque, sin lugar a dudas, cada uno y cada una de nosotros y nosotras tiene mucho para decir un día como hoy”.
Luego de destacar a la FFyH por la “excelencia académica, la seriedad de sus propuestas, la generosidad ofrecida y también por el acompañamiento permanente y la construcción común”, agradeció que esta Facultad haya sido “una red que contiene y sostiene. Gracias por invitarnos a pensar, por desafiarnos a discutir, por leernos y corregirnos, por ofrecernos posibilidades de la escritura y la producción académica, por apostar a la universidad pública, gratuita y de calidad”.
En sintonía con quienes la habían precedido en la palabra, Gazzulla dijo que “hoy más que nunca y especialmente en la coyuntura actual, me resulta indispensable ponderar el irremplazable rol del Estado en el diseño, el sostenimiento y el desarrollo de una educación pública y de calidad en todos sus niveles. Nuestra querida universidad ha sido y actualmente es reconocida, tanto en el ámbito nacional como también en las esferas internacionales, por la alta calidad académica de cada una de sus propuestas, y esto deja en clara evidencia que la pretendida intención de aplicar la lógica del mercado de oferta y demanda en el ámbito académico con el argumento de que la competencia garantiza la calidad, no sólo es improcedente sino que también es peligrosa, porque favorece innegables procesos de exclusión y desigualdad. Asimismo, la calidad, en términos académicos, lejos está de poder ser regulada por la lógica económica de los mercados. Siempre, pero quizás en estos días más que nunca, es urgente defender aquello que tal vez resultaba ser una certeza compartida y que sin embargo hoy pareciera estar otra vez en un terreno de disputa, simbólica y real: sólo porque existen estas garantías estatales es que todos y todas podemos asistir, permanecer y graduarnos en trayectos académicos del nivel y la calidad que nos ofrece nuestra querida Universidad Nacional de Córdoba. Es urgente defender la educación pública porque nosotros y nosotras hoy estamos siendo su más cabal testimonio. En cada escuela, en cada equipo de trabajo y de investigación, en cada esfera de lo social, en cada uno de los espacios que, como egresados y egresadas que hoy somos, estamos habitando o habitaremos, es donde se construyen las más irrefutables evidencias de que la educación pública, gratuita y de calidad es la apuesta democrática e igualitaria a la que no renunciaremos. Gracias Universidad Nacional de Córdoba, por transformarnos, por atravesarnos, por hacernos parte. Vamos a defenderte siempre”.
Patricia Inés Olea sería quien expresara una opinión en representación de lxs egresadxs de Grado y Pregrado, ella desde su flamante título de Bibliotecóloga, al reflexionar el valor de la constancia: “Leí una vez una frase que decía: nada sustituye la constancia: ni la inteligencia, ni el talento, ni la genialidad, solamente la constancia y la decisión lo consiguen todo. Y en este camino, la constancia se convirtió en nuestra aliada más leal. Cada página leída, cada tarea completada y cada desafío superado nos acercaron un paso más hacia este día”.
Como Lonatti, Dezzutto y Gazzulla, Olea también tuvo palabras para defender la gratuidad de la enseñanza superior: “La educación pública y gratuita representa oportunidad, inclusión e igualdad. Al invertir en este sistema, se invierte en el futuro de la nación, permitiendo que cada persona alcance su máximo potencial y contribuya al bienestar general. La educación no solo es un derecho fundamental, sino también una herramienta esencial para construir una sociedad más justa, solidaria y próspera. No olvidemos nunca que ese privilegio conlleva una responsabilidad: la responsabilidad de utilizar nuestro conocimiento para hacer del mundo un lugar mejor, más justo y más equitativo”.
Música y entrega de diplomas
Las reflexiones y las emociones expresadas en palabras le dieron paso al momento musical y sensitivo a través de la música. La artista Cecilia Mezzadra junto al pianista Jorge Martínez fueron lxs responsables de ponerle emoción a la ceremonia, interpretando tres canciones del repertorio popular que cobraban mucho sentido en las actuales circunstancias: La Cigarra, de María Elena Walsh, Razón de Vivir, de Víctor Heredia, y Soy pan, soy paz, soy más, de Piero.
Luego llegó el juramento, que fue tomado por la Decana, y después sí la parte más protocolar pero esperada por lxs egresadxs, que fueron subiendo para recibir de la mano de autoridades y docentes sus valorados títulos que acreditan su recorrido académico en las carreras de Posgrado, Grado y Pregrado (ver recuadro), logro que había sido destacado momentos antes por Dezzutto: “Una enorme felicitación para ustedes, el más sincero agradecimiento por todo lo que nos regalado en este tiempo en nuestra casa, y que los acompañe el deseo de una vida mejor, más justa y más verdadera para todos los hijos y las hijas de esta tierra”.
168 egresadxs Posgrado, Grado y Pregrado
Posgrado: Doctoras/es en Ciencias Antropológicas; Doctoras en Ciencias de la Educación; Doctoras/es en Filosofía; Doctor en Historia; Doctoras en Letras; Magister en Antropología; Magísteres en Pedagogía; Especialista en Adolescencia con Mención en Educación; Especialista en Adolescencia con Mención en Psicología del Desarrollo; Especialista en Antropología Social; Especialistas en la Enseñanza de la Lengua y la Literatura; Especialistas en la Enseñanza de las Ciencias Sociales con Mención en Formación Ética y Ciudadana; Especialistas en Enseñanza de las Ciencias Sociales con Mención en Historia y Especialistas en Psicopedagogía Escolar.
Carreras de Grado y Pregrado: Licenciadas/os en Antropología, Técnicas Profesionales Archiveras; Licenciadas/os en Bibliotecología y Documentación; Bibliotecólogas/os; Licenciadas en Ciencias de la Educación; Profesoras/es en Ciencias de la Educación; Licenciadas/os en Filosofía; Profesoras/es en Filosofía; Licenciadas/os en Geografía; Licenciadas/os en Historia; Profesoras/es en Historia; Profesora en Letras Clásicas, Licenciadas/os en Letras Modernas; Profesoras/es en Letras Modernas y Correctoras/es Literarias/os.
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