La FFyH firmó un convenio con la Escuela Florestan Fernandes del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra de Brasil

Entre sus objetivos se prevé elaborar proyectos de investigación, formación y extensión de forma conjunta y facilitar el intercambio de estudiantes, docentes y egresados de ambas instituciones. Además, en ese marco, el decano de la FFyH, Diego Tatián, participó como expositor en el tercer Seminario Latinoamericano: “La Juventud tiene que Crear”, que se desarrolló del 24 al 1º de marzo en Guararema. [08/03/2013]

En nombre de la UNC, la Facultad de Filosofía y Humanidades firmó un convenio con la escuela Forestan Fernandes, del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) de Brasil. El mismo tiene como objeto “elaborar proyectos de investigación, formación y extensión; fomentar el desarrollo de proyectos interinstitucionales vinculados a los derechos a la tierra, trabajo, salud, educación, soberanía alimentaria de comunidades indígenas y campesinas, y facilitar el intercambio de estudiantes, docentes y egresados de ambas instituciones”.

Entre los considerandos del convenio se resalta la “la importancia de la unidad latinoamericana como proyecto irrenunciable para el desarrollo y la emancipación de los pueblos hermanos. De ahí que el accionar de las organizaciones sociales y los movimientos campesinos resulte imprescindible para garantizar una producción agropecuaria sustentable y la soberanía alimentaria”.

La resolución señala también “la necesidad de profundizar la relación de la universidad pública y las experiencias organizativas regionales, que desde hace varias décadas vienen transitando este camino”.

En este sentido, cabe recordar que las relaciones institucionales entre la UNC y el MST comenzaron hacia varios años, pero recién el año pasado se materializaron en acciones concretas, como fue el encuentro en junio del 2012 entre el Movimiento Campesino de Córdoba, el Movimiento Sem Terra de Brasil y la FFyH, que organizó la Secretaría de Extensión de esta Facultad (Leer Intercambio para la transformación social en Revista Alfilo).

Latinoamérica unida

Entre el 24 de febrero y el 1 de marzo pasado, se realizó el tercer Seminario Latinoamericano “La Juventud tiene que Crear”, organizado por el MST y la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC) que tuvo lugar en la escuela Florestan Fernandes del MST. En la ciudad de Guararema, Brasil, dicho encuentro contó con la participación de más de 70 estudiantes universitarios y miembros organizaciones sociales de distintos países de América Latina, como Argentina, Venezuela, Uruguay, Ecuador, Colombia, entre otros.

En ese marco, el decano de la FFyH de la UNC, Diego Tatián, intervino en el panel “Movimientos Sociales, Universidad y el papel de los Intelectuales”, junto con un expositor de la UNRC y una representante del MST.

Este seminario latinoamericano es un espacio de formación y articulación entre múltiples movimientos sociales y organizaciones del continente, y se lleva a cabo desde 2011 como resultado de un acuerdo de cooperación entre la Universidad Nacional de Río Cuarto, el Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) y la Escuela Nacional Florestan Fernandes.

Durante los seis días que duró el encuentro se abordó el análisis de la coyuntura latinoamericana, los posibles escenarios bajo la perspectiva de los movimientos sociales, las experiencias de lucha de la juventud y la universidad y el papel de los intelectuales.

Entre los expositores, además de Tatián, participaron Lourdes Regueiro (del Centro de Investigaciones de Política Internacional Raúl Roa García de la Habana, Cuba), Jason Tadeu Borba (profesor del Departamento de Economía de la Facultad de Economía y Administración de la Pontificia Universidad Católica de Sao Paulo), Juan Ramírez (Área de Asuntos Políticos de la Embajada de Venezuela en Argentina), Joao Pedro Stedile (Coordinación Nacional del MST) y Hugo Moldiz Mercado (Fundación para la Democracia Multipartidaria, Bolivia),

Entre los objetivos de la actividad se destacaron el “aporte a la construcción y socialización de conocimiento estratégico, la practica vivencial de la integración, y la generación de articulaciones que contribuyan a fortalecer las condiciones de lucha de las organizaciones embarcadas en la liberación de los pueblos”.

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