La salud no es sólo cosa de médicos

En una actividad organizada por la Secretaría de Extensión de la FFyH, la Facultad de Ciencias Médicas, Gapurmed, Hemoderivados y Médicos Sin Fronteras, el jueves 11 de octubre se realizó una charla sobre “Investigación, producción y el uso saludable de medicamentos” que confirmó la riqueza del abordaje multidisciplinario de temas que afectan la vida humana. [12/10/2012]

“Desde la universidad pública entendemos al medicamento como un bien social, y al tratamiento de una enfermedad como un derecho humano. De ahí la necesidad de abordar la salud desde una perspectiva multidisciplinaria, no como algo sólo de médicos, y la explicación de que la Facultad de Filosofía y Humanidades haya decidido participar de esta actividad, que nos llena de orgullo y nos obliga a seguir por este camino”, dijo Liliana Pereyra al cerrar el panel de reflexión y debate “Investigación, producción, decisiones y uso saludable de medicamentos”, que el jueves 11 de octubre reunió a destacados profesionales de las ciencias médicas en el Auditorio K de la Facultad de Odontología.

Organizada por la Secretaría de Extensión de la FFyH, la Facultad de Ciencias Médicas, Gapurmed (Grupo argentino para el uso racional de medicamentos), el Laboratorio de  Hemoderivados de la UNC y la organización humanitaria Médicos Sin Fronteras, la charla abordó desde distintos ángulos la importancia estratégica que tiene para las sociedades que el sector público sea un actor importante en la producción, la investigación y el uso de los medicamentos a la hora de combatir enfermedades consideradas “olvidadas”, como el Mal de Chagas, que siguen haciendo estragos entre los sectores pobres de América Latina y otros lugares del mundo, a los cuales la enfermedad se expandió por los efectos de la globalización económica y cultural.

“En el conjunto de problemas abordados desde la Secretaría de Extensión de esta Facultad, uno de particular importancia lo constituyen las políticas relacionadas a la salud de las personas. Por eso, y en el marco de las actividades por la celebración de los 400 años de la UNC, la FFyH, junto a otras unidades académicas y dependencias dentro y fuera de nuestra Universidad, llevamos adelante este espacio multidisciplinar para abordar algunos aspectos de esta compleja temática”, resaltó Pereyra, ante de ceder la palabra a un panel integrado por profesionales de gran experiencia y compromiso social en lo que respecta a la investigación, producción y uso de medicamentos.

Ana López, especialista en clínica médica y docente universitaria en la cátedra de Farmacología Aplicada de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNC, hizo hincapié en la importancia que tuvo y tiene la formación de los estudiantes en el paradigma del uso razonable de medicamentos: “Desde 1999 a la fecha unos 1360 alumnos hicieron el Curso Latinoamericano de Enseñanza de Farmacología Racional, que aborda el uso de medicamentos desde una visión de los Derechos Humanos, ofreciéndole al paciente más y mejor información y teniendo en cuenta su opinión”.

Catalina Massa, directora ejecutiva del Laboratorio de Hemoderivados, resaltó el valor de que el sector público produzca medicamentos entendidos como un bien social, con el objetivo de satisfacer las necesidades de la población y reducir los costos de la salud pública, aunque advirtió que es fundamental que las instituciones sean eficientes, autosustentables y competitivas en el mercado: “Para esto es clave mantener la calidad de los productos, desarrollar la investigación y la parte tecnológica y gestionar de manera transparente y con criterios comerciales las instituciones”. En sentido, resaltó que “Hemoderivados reinvierte todas sus utilidades en desarrollar la institución, y eso es lo que nos ha permitido crecer en lo que hacíamos y producir nuevos medicamentos con la construcción de tres nuevas plantas que estamos por inaugurar a fines de este año y principios de 2013”.

Como broche de oro a una muestra que duró diez días en el Museo de Antropología de la UNC, la doctora Lucía Brum, de Médicos Sin Fronteras de Brasil, fue la tercera expositora de una actividad que contó con la presencia de médicos, 

farmacéuticos, profesores, estudiantes y autoridades de la UNC y otros organismos sanitarios. Brum habló básicamente sobre el Mal de Chagas, “una de las enfermedades que se consideran olvidadas, pero que sigue afectando a millones de personas de poblaciones pobres. Las cifras hablan de 500 mil personas que se mueren por este tipo de patologías, pero solo del 3,2% del presupuesto mundial se destina la producción de este tipo de medicamentos, cuando seis enfermedades afectan al 80 por ciento de la población mundial”. De gran activismo en América Latina, la doctora se quejó de que la industria farmacéutica “no produzca medicamentos que no sean rentables económicamente”, y por eso bregó por el trabajo conjunto entre organizaciones humanitarias como MSF y el sector público.

El cierre del panel estuvo a cargo de Joan-Ramón Laporte, catedrático de Farmacología, Terapeútica y Toxicología de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Barcelona, y ex asesor de la OMS, UNICEF y el Banco Mundial. Laporte centró su disertación sobre los efectos que tienen algunos medicamentos para el tratamiento del Mal de Chagas, que según él “es un mal que hoy no solo afecta a las zonas endémicas históricas (América Latina y África), sino también a países de Europa a partir del proceso de globalización, que permite que los vectores se trasladen de una región a otra”.

Agradecida por la participación de profesionales y organismos tan reconocidos por su trayectoria y trabajo en el ámbito académico y social, Pereyra saludó el hecho de llevar a la práctica este trabajo en conjunto y diverso: “Las tensiones y los interrogantes que se generan cuando consideramos la necesidad de entender a los medicamentos como bienes sociales, motivaron a que hoy hayamos podido llevar adelante este panel, y que podamos estar orgullosos de haberlo podido hacer. Por eso los invitó a repetir esta experiencia, porque estamos convencidos que la salud no es solo cosa de médicos, sino un abordaje integral de la persona humana”.

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